una de las tradiciones más emblemáticas y místicas
para los mexicanos, ya que a través de esta festividad
se le rinde tributo a familiares, amigos, compañeros de
trabajo, personalidades de la política y el espectáculo
que ya murieron. A lo largo de dos días las personas
recuerdan a sus difuntos, el día primero de noviembre
se recuerda a los niños muertos y el día dos de noviembre
a los adultos fallecidos.