“En tiempo de enfermedad o de muerte”, escribió Lucy Grant Cannon, una de las hijas del presidente Heber J. Grant, “la entereza de mi padre era extraordinaria. Cuando su hijo [Heber Stringham Grant, de siete años de edad] estuvo postrado en cama durante más de un año, y en los últimos meses de su vida en los que solía padecer grandes dolores, papá se sentaba junto a la cama [del niño] donde pasaba horas mitigando su sufrimiento. Se quedaba en su habitación acompañándole todo lo que le era posible y, cuando el niño falleció, mi padre se resignó aun cuando sabía que con respecto a su posteridad terrenal probablemente no tendría ningún hijo varón que llevase su apellido.
domingo, 4 de noviembre de 2007
El consuelo de la muerte
Publicado por :: Pablo Pozo :: en 18:41
Etiquetas: Ilustracion :: SANTA MUERTE
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